• werr
  • wer
  • weeee

Crisol Internacional: “El precio de la libertad de un gitano, Rumania…”

Escrito por Andrea König Fleischer en Viernes, 01 Septiembre 2017. Publicado en Crisol Internacional, Cultura, Política, Sociedad

¿Quién no ha escuchado hablar de los “Gitanos”, de sus  aventuras, costumbres, mitos y también de los prejuicios que todavía existen en contra de ellos… y quién no ha perseguido en algún momento de su existencia el sueño de “una vida libre”, durmiendo bajo el cielo y las estrellas, mudarse de un lugar a otro en un “dos por tres”, sin grandes preocupaciones y temores? ¿Pero qué tan cierta o real es esta imagen del “Gitano libre y despreocupado?  Asimismo debemos plantearnos la interrogante si aún persisten los estereotipos  acerca de los gitanos, mismos que en su gran mayoría son negativos y difundidos por diferentes medios de comunicación, es decir, las voces de otros que muy probablemente jamás han convivido con un gitano o peor aún, cuando estos prejuicios se pasan  de generación en generación, pintando una imagen  adversa de que “los gitanos no son de fiar, son vagos y ladrones, que se la pasan bailando, bebiendo y cantando todo el tiempo”….

Veamos al respecto e inicialmente algunos datos. En el “Viejo Continente”, habitan y transitan del Este hacia el Oeste y de Norte a Sur aproximadamente 12 millones de gitanos y desde hace siglos, cuando sus antepasados migraron originalmente desde la India hacia Europa y especialmente hacia la región de Rumania  donde hoy  día “radican” más de 2 millones de ellos. Las estadísticas actuales revelan que los gitanos son la minoría más numerosa de Europa y a pesar de que llegaron ahí hace siglos, aún continúan estigmatizados por una fuerte discriminación y un no oculto rechazo social. Muchas familias gitanas, especialmente en el Este de Europa se encuentran en situaciones de marginación y pobreza. A grandes rasgos los niveles educativos de la población gitana están rezagados y muchos de los adultos mayores siguen su vida como analfabetos, lo que obviamente representa la principal limitante para una mejor formación laboral y un empleo formal. Igualmente sus condiciones de vivienda No son las adecuadas, morando por lo general en viviendas o refugios improvisados, poco salubres y apartados de los centros urbanos y substancialmente lejos de todo el romanticismo  y sueño de libertad que ese grupo emana.  Actualmente y como sabemos en el seno del Consejo de la Unión Europea  ya se han adoptado medidas jurídicas para promover la inclusión social de esta minoría, impulsando a través de Fondos Estructurales e Inversión (2014-2020) el compromiso de los 27 Estados Miembros con la inclusión social y económica de sus gitanos, así como campañas que promueven la DIGNIDAD HUMANA como un eje central de acción y tolerancia

Existe un consenso relativo entre los estudiosos de la historia del pueblo gitano, llamado originalmente como  “rromano´thém” de origen indio, en concreto del Noroeste de la India de las regiones del Punjab y Sinth, cuyos habitantes paulatinamente tras la invasión islámica en el siglo IX se fueron desplazando hacia el Oeste. Posteriormente hubo otra oleada de migraciones durante el siglo XIII, cuando los ejércitos mongoles del Norte conquistaron zonas de la India, motivando la huída de los hoy llamados gitanos y el abandono de sus tierras, causando este éxodo de viajeros que continuó durante muchos siglos. Aquellos primeros gitanos llegaron hasta las orillas del Mar Mediterráneo y tenían diversos oficios comprendiendo desde soldados, agricultores, artesanos y artistas. Sin embargo, las hambrunas, las guerras y los desordenes políticos de aquellos tiempos motivaron su constante desplazamiento en búsqueda de mejores condiciones de vida. Durante su travesía sus costumbres y lenguas  se fueron mezclando con los de los locales de toda Europa, configurándose así los grandes grupos gitanos que han sobrevivido el paso del tiempo como son los kalé, lovari, sintí, kalderash y manouche.

De su histórico pasado, marcado por la  emigración  y constante persecución  hasta el presente, los gitanos han pasado por TODO: acecho y esclavitud, violaciones de los derechos humanos, el Holocausto nazi, “la limpieza étnica en la antigua Yugoslavia”, la negación de asilo político e incluso su expulsión de algunos países europeos. Es por eso que hoy día la población gitana joven lucha con nuevos medios y apoyos para ser reconocidos, tener una Oficina  Central en Defensa de los Derechos de los Gitanos, preservar su legado cultural, obtener acceso a la educación especial  e incluir la cultura romani a los contenidos curriculares de los países miembros de la Unión Europea; así como también, mejorar las condiciones de salud y seguridad y también la defensa de las mujeres gitanas creando una Red de Mujeres Gitanas. Ante el actual escenario de los miles  de refugiados provenientes de muchos lugares que han cruzado Europa durante los últimos años, el destino de los gitanos sigue incierto y la imagen del gitano sigue siendo ambigua…como si la sombra del pasado llena de matices oscuros  persistiera…

Ahora bien Rumania es un  país Ex Socialista que se ubica en un punto estratégico entre la Europa Central y la del  Este y que cuenta con acceso al Mar Negro, más del 10% de su población total son gitanos que han buscado al igual que el resto del pueblo rumano una mejoría de sus condiciones tras las reformas socio-económicas y la lenta transición hacia el Capitalismo. Rumania es  desde hace décadas un popular destino turístico en el Este de Europa, reconocido por el  gran sentido de hospitalidad  de su gente y especialmente el de los gitanos que en su mayoría están dispuestos a compartir su morada y algunas costumbres con el viajero. Rumania también es la tierra de los castillos misteriosos, de la legendaria Transilvania y de ricos  y muy abundantes platillos, así  como de  las bellezas  del Mar Negro y del extraordinario Delta del río Danubio que oportunamente ya fue  designado como Reserva de la Biósfera por la UNESCO y  que año tras año atrae centenares de visitantes de todas partes del mundo. Tal vez sean estos visitantes o viajeros los que descubrirán parte del alma gitana que vibra justo ahí en Rumania y que se puede palpar a través de su música, folklor,  cocina y sobre todo, su  alegre y achispado espíritu y esa muy personal filosofía y temple ante TODAS  las adversidades que la vida pueda presentarles y entonces poder comprender que “El precio de la libertad de un gitano” es alto, muy alto, pero  que él siempre lo pagará…

P.S.: http://estereotiposprejuicios.blogspot.mx/2012/04/etnia-gitana.html

https://www.gitanos.org/que-hacemos/areas/internacional/situacion.html

Sobre el origen  y los retos actuales de los gitanos: http://www.unionromani.org/pueblo_es.html

Acerca del Autor

Déje un comentario

Estás comentando como invitado.