• werr
  • wer
  • weeee

Fecalismo local: Guau o Miau

Escrito por Ramón Ojeda Mestre-QEPD en Lunes, 06 Septiembre 2021. Publicado en Artículos de opinión en BCS, Conoces a Nuestros Colaboradores, Opinión, Ramón Ojeda Mestre, Sociedad

Como criar cães e gatos juntos? | Elite Moda Pet

Por Ramón Ojeda Mestre

 

Cursi que es uno como provinciano, de niño lloré varias veces al escuchar Los Motivos del Lobo del genial nicaragüense Rubén Darío y ya en mi primera juventud me sobré con El Cuervo, de Edgar Allan Poe y he tenido la inmerecida fortuna de ver el Poema Cats de T.S Elliot (Old Possum's Book of Practical Cats) con su maravillosa versión musical en grandes teatros del mundo, pero con todo y amar a los perros, jamás he podido encontrar un poema que los coloque estética y literariamente en el sitial que merecen, la verdad y no se qué esperan los poetas para enaltecerlos como lo han hecho con los caballos y otras aves.

 

Tal vez usted si conoce alguno que le guste. Siempre las lectoras o los leyentes saben y conocen más que uno, lógico: son mucho más los que leen que los que escriben y desde luego que la mayoría sabe más y por eso el enorme intelectual, filósofo, poeta y escritor Raymundo Ramos sentenció: todo lo sabemos entre todos, recordando al “mexicano universal” Alfonso Reyes que dijera con justeza y justicia Jorge Luis Borges, ni más ni menos.

 

Pero no nos distraigamos, al toro, el hecho es, ya de suyo, escatológico o coprológico. Tiene que ver con el hecho de dos factores que están creciendo en dimensiones y complejidades asaz patológicas: el fecalismo al aire libre canino, felino y humano. Y, por si fuera poco, colombino. Para nadie es un Victoria Secret que cada vez que llueve en Los Cabos, la COEPRIS tiene que decretar una veda o prohibición por una semana de que no se produzca, cocine, comercie o consuman alimentos al aire libre, como Hot Dogs, Elotes, esquites, fritangas y otras maravillas engordantes, debido a que al resecarse la humedad pluvial y los arroyos diversos en las zonas urbanas, toda la materia orgánica que proliferaba, prácticamente epiza a volar contaminando todo y se incrementan las enfermedades gastrointestinles y otro tipo de infecciones.

APLICÓ COEPRIS NUEVAS SANCIONES A ESTABLECIMIENTOS DE LA PAZ Y LOS CABOS –  Información de Coronavirus

 

Todos sabemos que la pandemia ha dejado maltrecha, en serio, la economía de los hogares, y en muchos, con todo el dolor de su corazón han dejado que perros y gatos salgan a buscar libremente su alimento en bolsas de basura, en baldíos, o incluso en los rincones aledaños a los múltiples establecimientos de restaurantes, bares o “fondas chiquitas” y expendios de cualquier ralea, sin ánimo de ofender a los tacos magníficos donde usted, sensual mujerona, y yo, solemos ir a comer. (Usted con el suyo y yo con la mía).

 Tiran a un gato a un contenedor de basura, mas la vida da un giro  extraordinario

Peor aún, es mi obligación heurística recordarle que la mayoría de los hogares de Los Cabos no tienen un baño convencional y casi treinta mil descargan al aire libre, el 80% no tiene drenaje y los hoteles y desarrollos inmobiliarios tienen que recurrir a las “fosas sépticas” o plantitas de tratamiento con resultados preocupantes de generación de moscas y otros especímenes temibles e invencibles como las cucarachas Blattodeas, de las cuales existen aproximadamente 4,000 especies en el mundo, según la National Pest Management Association (NPMA) y que están hace millones de años acá en el planeta, es decir, mucho antes que usted y yo que ya somos lagartijas muy peñasqueadas.

 

Cada perro, cada gato y cada blanca y linda paloma, dejan su impronta fecal una o dos veces al día en nuestros cabeños 3,751 km², para que tengamos más clara la película, en esta superficie cabe 53 veces el municipio de Nezahualcóyotl y ¡Más de dos veces la Ciudad de México!!! Órale. Se ha dicho que en el Municipio de los Cabos hay más de medio millón de gatos y perros callejeros que generan mínimo cinco toneladas de heces fecales al día, al mes 150 toneladas, y al año 1,825 toneladas de detritus contaminantes que generan un problema serio de morbilidades, insectos, olores, imagen negativa, cultura de la suciedad, derrotismo y desconfianza en las instituciones y en nuestra propia capacidad de solucionar estos fenómenos.

 

IMPORTANTE: Para todos los propietarios de mascotas en La Paz – Colectivo  Pericú

Recomiendo ver el Estudio para la estimación de la población de perros callejeros en Mercados Municipales del Distrito Metropolitano de Quito. DMQ Gabriela Janir Cadena García y otros documentos similares para ver cómo podemos afrontar de diversas maneras el fenómeno. Lo que no podemos aceptar es darnos por vencidos.

Cierto que no sólo es el fecalismo canino, felino, colombino y humano lo que genera la cantidad de moscas, cucarachas y otros insectos, sino que abona el hecho de que estemos regando los veinte campos de golf y los camellones, parques y jardines, con aguas semi tratadas que portan una carga orgánica que tendrá que vérselas con la Norma Ecológica que acaba de ser aprobada para aguas residuales y se publicará esta semana que viene en el Diario Oficial de la Federación.

 

Algo peor: los perros callejeros están atacando con mayor frecuencia a los humanos, organizados en jaurías ocasionales, como ocurrió el primero de septiembre a Simona Cavallaro que disfrutaba de un tranquilo picnic con su novio, quien sí logro huir y salvarse. Los perros callejeros son muchas veces fieros o agresivos y más en situación de stress.

 Simona, la joven de 20 años mutilada y asesinada por perros callejeros

La sociedad y las autoridades tenemos que tomar decisiones y aplicar medidas muy drásticas para atajar, atenuar o evitar esta fecalización urbana en plena pandemia de Covid, más lo que se acumule con la sobre densificación demográfica urbana. Siete de cada diez hogares tienen una mascota y la crisis económica está lanzando a los pobres animales a la “situación de calle”.

 La Jornada Maya

No se pueden convertir las calles, las banquetas o los parques y jardines en espacios abiertos al fecalismo animal, aún reconociendo que uno de cada diez paseantes de perros y gatos, recoge con cierta regularidad sus defecaciones, no generemos más tensiones entre los urbanícolas. No está el horno para bollos, ni la Magdalena para tafetanes. Conste que me arriesgo a comentarle esto que molesta a los que quieren creer que no pasa nada, aunque su nariz se los indique. Pecunia non olet dijo Vespasiano.

Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

 

Acerca del Autor

Ramón Ojeda Mestre-QEPD

Déje un comentario

Estás comentando como invitado.