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Revista Tamma Dalama: ¿QUÉ ES LA MEGA-MINERÍA TÓXICA? Y SUS GRAVES CONSECUENCIAS EN BAJA CALIFORNIA SUR (PARTE II)

Escrito por Tamma Dalama, Universidad Mundial. en Lunes, 20 Agosto 2018. Publicado en Revista Tamma dalama, Revista Universitaria Tamma Dalama, Tamma dalama, Tamma dalama, Universidad Mundial, Universidad Mundial, Universidad Mundial BCS

¿QUÉ ES LA MEGA-MINERÍA TÓXICA?

Y SUS GRAVES CONSECUENCIAS EN BAJA CALIFORNIA SUR

Por Dr. Arturo Cruz Falcón[1]



[1] Arturo Cruz Falcón. Oceanólogo Geólogo de la Facultad de Ciencias Marinas de la UABC; Maestro en Ciencias en Geofísica de Exploración del CICESE; Doctor en Ciencias Marinas del Instituto Politécnico Nacional (IPN-CICIMAR), con experiencia en estudios de procesos litorales, geofísica y geohidrología de la zona costera, cuencas y acuíferos. Ha participado en congresos nacionales e internacionales y publicado artículos científicos y de divulgación. Trabajó en CICESE como responsable de la Red Sismográfica en BCS; en la iniciativa privada en el diseño e  instalación  de sistemas de energía alternativa para producir electricidad. Actualmente labora en el CIBNOR, en la línea de Agua, Suelo y Clima, en estudios sobre disponibilidad y calidad de agua de acuíferos en BCS. Técnico-Investigador del CIBNOR, La Paz BCS. Especialista en Geofísica de Exploración ( Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. ).

 

Figuras 8 y 9. Perforación: Se perfora el terreno para colocar los explosivos y fragmentar la roca.

Figuras 10 y 11. Voladura: Los agujeros hechos con barrenos, son llenados con dinamita, que al detonar fragmentan la roca y remueven el material. Con esto se producen grandes nubes de polvo. Este polvo, que es un veneno, se le llama polvillo minero de las explosiones. Se dispersa en el aire y atmósfera, pudiendo llegar fácilmente a los núcleos de población y aspirarse por los pobladores produciendo enfermedades graves en las vías respiratorias.

 

Poco a poco se va escarbando en forma circular para abrir camino y permitir el tránsito de enormes camiones de carga. Así se empiezan a cavar hoyos en forma de cono que se convierten en cráteres gigantescos llamados tajos (Figura 12), y se continúan utilizando los fuertes explosivos para romper las paredes de los cerros, lo que permanentemente genera ruido y polvo.

 

En solo esta parte del proceso ya se ha afectando y devastando una amplia zona de terreno. El hoyo o cráter que se terminará excavando puede alcanzar un diámetro de más de 1 km en la superficie del terreno (Figura 13), y una profundidad de más de 400 metros, dependiendo de la extensión y profundidad del filón, veta, o de la distribución del mineral que contiene oro.

 

Figuras 12 y 13. Corte del terreno con dinamita para formar los tajos. Durante el proceso de extracción se crea un enorme cráter de 1 km de diámetro y más de 400 m de profundidad, de donde se extrae el material que contiene el oro. En el fondo del cráter queda un caldo concentrado de sustancias y elementos tóxicos, que contaminarán el agua subterránea y causarán la muerte a todo animal que se introduzca o beba esta agua.

Para dar una idea del tamaño del cráter, en el mapa de Google Earth se trazó un polígono a escala sobre las calles de la ciudad de La Paz (Figura 14).

Figura 14. Polígono a escala (color blanco) de 1 km de diámetro sobre las calles de la ciudad de La Paz, que representa el tamaño del enorme cráter que se excavará en la zona donde se establecería la minera para extraer el oro.

Después de la voladura y fragmentación del terreno, el material como bloques y pedazos de roca está listo para ser recogido. La maquinaria pesada realiza la carga y acarreo del material con alto porcentaje de metal (Figura 15 y 16) y lo traslada a una trituradora para ser molido hasta convertirlo en polvo (Figuras 17 y 18).

El material con bajo porcentaje de metal es acumulado en la superficie del terreno cercano conformando los terreros o tepetateras (Figuras 19, 20 y 21), que no son más que montones de tierra y escombro, los cuales son fuente de contaminación de aire y agua por todos los minerales asociados que contienen, y que pueden ser transportados por el viento y el agua de lluvia.

Figuras 15 y 16. Carga  y Acarreo de material. Camiones gigantes llevan el mineral extraído a una trituradora.

 

Figuras 19, 20 y 21. Terreros o tepetateras. Son los montones de tierra y escombro abandonados. En ellos no germina ninguna planta debido a su alta toxicidad producto de los contaminantes que están presentes. Cuando llueve se lavan estos materiales, arrastrando el drenaje ácido producido al reaccionar el agua de lluvia con los sulfuros presentes en el mineral.

El material con alto porcentaje de metal que fue triturado, después de quedar pulverizado, se deposita en forma de pirámide en unas pilas llamadas de lixiviación o disolución (Figuras 22 y 23 ).

Figuras 22 y 23. Pilas de lixiviación. Se utilizan para separar el oro del material triturado, rociando agua mezclada con cianuro de sodio. En el fondo de estas pilas se construyen pozas donde quedan muchos contaminantes e impurezas, y cuyo fondo se recubre con una membrana de plástico.

Para separar el oro del material pulverizado se utilizan grandes cantidades de cianuro de sodio (una sustancia muy tóxica) mezclado con agua, que se rocía repetidamente sobre el material acumulado en las pilas (Figuras 24 y 25). La solución de cianuro lava y une las partículas microscópicas de oro, y mediante un sistema de tuberías colocadas en la base de la pila pasan a una poza donde se bombea hacia la planta de procesos para recuperar el metal.

Como parte de las diferentes etapas del proceso minero, los materiales y líquidos de desecho ya mencionados, se acumulan en un sitio que se habilita para ello conocido como presa de jales (Figura 26), construida con tierra compactada, rocas o concreto, con una capa de arcilla en el fondo protegida con una membrana de plástico llamada geomembrana (Figuras 27), supuestamente muy resistente que protegerá durante muchos años la parte interna de estos depósitos, evitando fugas del material e infiltración de los contaminantes al subsuelo, lo cual es evidentemente falso.

En las presas de jales se acumulan los desechos como algunos montones de roca triturada (terreros o tepetateras) con arsénico y otros elementos tóxicos así como el agua con cianuro, lodos, y otros muchos contaminantes asociados procedentes de las pilas de lixiviación.

 

Figuras 26 y 27. Presas de jales. Esdonde se depositan y almacenan los jales, que son los residuos sólidos y líquidos generados en las operaciones de separación y concentración de minerales. En la mayoría de los casos, y con el tiempo, estas presas presentan fugas y rompimientos (en sus paredes o en la geomembrana) lo que provoca que los contaminantes se escapen impactando el entorno y contaminando el agua subterránea.

 Finalmente, el metal recuperado se funde para hacer los lingotes de oro (Figuras 28 y 29).

 

Figuras 28 y 29. Fundición del oro recuperado, con el que se hacen lingotes.

Al terminar la operación minera, se deja un tremendo cráter con una sopa de agua contaminada en el fondo (Figuras 30 y 31).

Figuras 30 y 31. Terminación de la explotación minera. Permanece un enorme cráter en forma de cono, de 1 km de diámetro y más de 400 m de profundidad producto de la extracción de roca para obtener oro. Al fondo, en el centro, queda un caldo concentrado de sustancias y elementos tóxicos, que evidentemente contaminará el agua subterránea.

El panorama presente y futuro de toda la zona donde se lleve a cabo el emplazamiento minero advierte que quedará chatarra de maquinaria, montones de escombro con material tóxico, pilas con materiales y soluciones tóxicas, y presas de jales con material y mezcla de cianuro, metales pesados como cadmio, cromo, plomo, níquel, selenio, sulfuros e impurezas (Figuras 32, 33, 34 y 35).

Figuras 32, 33, 34 y 35. Panorama de lo que quedará al final de la operación minera. Montones de escombro con material tóxico, chatarra, pilas con materiales y soluciones tóxicas, y presas de jales con material y mezcla de cianuro, metales pesados como cadmio, cromo, plomo, níquel, selenio, sulfuros e impurezas, animales muertos, etc.

 

Entonces viene la etapa de “restauración”.

 

Esta etapa consiste en una serie de acciones para rehabilitar las áreas afectadas. Según para devolver a la zona explotada las condiciones similares o mejores a las que se tenían antes de iniciar las operaciones mineras. Los mineros dicen que el suelo, la vegetación y la fauna se recuperarán en el entorno original. Como si fuera tan fácil y por arte de magia crear un jardín y paisaje hermoso, mejor que como estaba antes.

La pregunta es: después de una devastación minera de este tipo, se podrá hacer una restauración total para devolver las condiciones naturales que tenía la zona afectada?; y la respuesta es: imposible.

La verdad es que después de terminada la extracción de oro, se deja un  suelo alterado y contaminado que no tendrá ningún valor para la agricultura, ganadería,  vivienda o alguna otra actividad (Figuras 36 y 37). En muchos de los casos, al finalizar la explotación minera la empresa se declara en quiebra y deja solo abandono, destrucción y contaminación. Si la empresa no se retira, entonces hará una restauración a medias, y posiblemente seguirá extrayendo oro (ya que su concesión cubre un área de terreno muy amplia) haciendo otro cráter enorme y destruyendo y contaminando aún más. Se repetirá lo mismo.

Figuras 36 y 37. Esquema hipotético que muestra cómo quedará la zona explotada después que termina todo el proceso minero. Restauración? En su lugar se dejan los cerros planos sin vegetación y erosionados, hoyos con material contaminado, basura y escombros. Material tóxico, chatarra, pilas con soluciones tóxicas, y presas de jales con material y mezcla de cianuro, metales pesados, animales muertos, etc.

 

9. Parte 2. Contaminación e impactos ambientales que se presentaría en el municipio de La Paz por causa de la mega-minería tóxica.

 

Una porción de la Sierra de La Laguna y la zona serrana adyacente está concesionada para la minería (Figura 38). Desafortunadamente, se trata de las partes altas de las cuencas hidrológicas de La Paz, El Coyote, Los Planes y El Carrizal (Figura 38).

 

Una cuenca hidrológica se define como una superficie del terreno en forma de “depresión” que capta el agua de lluvia. Una parte del agua que cae se evapora, otra es transpirada por las plantas, otra escurre por los arroyos, y la restante se infiltra al subsuelo para recargar los acuíferos. Así, en una cuenca hidrológica se lleva a cabo lo que conocemos como ciclo hidrológico o ciclo del agua. Pero además, en ella tienen lugar los procesos físicos y biológicos de la naturaleza en torno al ciclo del agua, por lo que es la unidad fundamental de planeación para el ordenamiento ecológico de un territorio. Entonces, cualquier actividad que se realice en una cuenca hidrológica va a repercutir en ella misma.

 

En nuestra región, las partes altas de estas cuencas hidrológicas son las principales áreas de captación de agua de lluvia y recarga de acuíferos. Debido a ello tenemos agua.

En el caso de establecerse la industria de la mega-minería tóxica, estaremos potencialmente sujetos a impactos nocivos al medio ambiente en general, incluyendo la salud de las poblaciones, lo que ocasionará un daño enorme a mediano y largo plazo.

Figura 38.  Áreas concesionadas para explotación minera (polígonos color marrón). Se localizan en las partes altas de las cuencas, que son las mismas zonas de captación de agua de lluvia para recarga de los acuíferos (línea punteada en color azul). La línea amarilla es el polígono que envuelve a la Reserva de la Biósfera Sierra La Laguna (REBIOSLA). Los círculos rojos son las zonas donde se ubican los potenciales proyectos mineros Los Cardones y La Pitalla. El círculo blanco dentro del círculo rojo (Los Cardones) muestra el tamaño del hueco o cráter (a escala) que dejarán por la excavación de los tajos para extraer la roca que contiene oro. Las letras en blanco denotan las cuencas hidrológicas.

10. Descripción de lo que en realidad sucedería durante las diferentes etapas de extracción de oro y después de que termina toda la explotación.

  1. Deforestación severa durante el proceso de explotación en las zonas serranas de las cuencas de La Paz, Los Planes y El carrizal, que son las principales zonas de captación y recarga de agua de lluvia, lo que provocará erosión disminuyendo la capacidad de captación, y por consiguiente menor recarga de los acuíferos.
  1. Riesgo por derrame de substancias tóxicas y contaminantes en el proceso de transporte al sitio de la mina, y por los trabajos de excavación y extracción.
  1. Contaminación por ruido, debido a las continuas y fuertes explosiones para romper la roca.
  1. Riesgo y contaminación por el polvo fino producido en la fracturación de la roca con explosivos durante la extracción y molienda. Existe un peligro latente por la distribución de polvos e impurezas sólidas con altos contenidos de arsénico y metales pesados sobre los núcleos de población, que incluyen la ciudad de La Paz, lo que traerá como consecuencia problemas en las vías respiratorias a la gente.
  2. Durante el invierno los vientos del Norte con velocidad de hasta más de 30 km/h, pueden desplazar los polvos hacia el Sur, afectando los ejidos circunvecinos, rancherías y poblados. Durante el verano se presentan vientos conocidos como Coromuel (en ocasiones de hasta 25 km/h) con predominancia del Sur. Los polvos se pueden desplazar hacia las localidades ubicadas al Norte. Esto, sin duda, provocará graves problemas de salud a la población, principalmente en las vías respiratorias.
  1. El mineral asociado con el oro que se pretende explotar se conoce como Arsenopirita (Figuras 39 y 40). Este mineral contiene arsénico en un 46%, que en estado natural no produce contaminación notable, pero al momento de romper, triturar y pulverizar deja expuesto el arsénico y otros elementos dañinos y tóxicos para ser transportados por el viento y/o a ser arrastrados por el agua de lluvia.
  1. Al quedar la roca triturada acumulada y expuesta, los elementos tóxicos presentes en ellas pueden ser más fácilmente arrastrados por la lluvia e infiltrase al subsuelo contaminando el agua subterránea con arsénico y otras sustancias tóxicas asociadas, envenenando el agua de los pozos que abastecen a las diferentes localidades.
  1. El arsénico es un elemento que forma compuestos venenosos, bien conocido desde hace siglos por sus propiedades de alta toxicidad, ya que afecta a la salud humana causando daños al sistema nervioso y respiratorio, produce graves consecuencias en la piel, hígado y riñones. Uno de los principales síntomas de una ingestión prolongada es la hiperqueratosis (engrosamiento de la capa externa de la piel) de las palmas de pies y manos.
  2. La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece un contenido máximo permisible de arsénico en el agua para consumo humano de 0.01 miligramos por litro (mg/l). La mega-minería tóxica elevaría notablemente las concentraciones de arsénico en el agua de los pozos que abastecen a las diferentes localidades.
  1. Un caso real de contaminación de acuíferos por causa de la minería tóxica lo tenemos muy cerca en las poblaciones ubicadas en el valle de Los Planes, donde muchos de los pozos contienen agua con alta concentración de arsénico (muy por arriba de las normas oficiales), que es producto del lavado de roca triturada que dejaron las compañías mineras que se instalaron en el poblado de San Antonio, en las faldas de la sierra de La laguna, hace mas de 130 años. Los pobladores de esa zona presentan problemas de salud, principalmente casos de cáncer.

 

 

  1. Figuras 39 y 40. Variedades del mineral de arsenopirita. Se puede encontrar asociado con oro y plata, regularmente junto con cuarzo o calcita.
  1. Como la arsenopirita contiene arsénico y azufre, al entrar en contacto con el agua reaccionan formando ácido sulfúrico, el cual a su vez disuelve algunos metales contenidos en la roca formando lo que se conoce como drenaje ácido(Figuras 41 y 42). Esta solución puede afectar considerablemente los recursos hídricos contaminando el agua superficial y subterránea y por consiguiente afectar la salud de la gente, parecido a lo que produjo en agosto de 2014 por la minera del Grupo México, localizada en Cananea Sonora, que debido a la ruptura o desbordamiento de la presa de jales o de las piletas de lixiviados, contaminó al río Sonora con cobre, arsénico, aluminio, cadmio, cromo, fierro, manganeso y plomo.

  1. Figuras 40 y 41. Drenaje ácido altamente corrosivo, producto de la minería. El agua con drenaje ácido es altamente dañino para la agricultura, destruye las plantas, envenena a los animales y causa problemas graves de salud en la gente.
  1. Las presas de jales pueden desbordarse, o la geomembrana que tienen como protección, puede sufrir fácilmente algún daño, provocando fugas de contaminantes como sales (cianuro de sodio), minerales o metales asociados al oro como metaloides (arsénico), no metales (plata, azufre), metales pesados (plomo, mercurio), minerales (cobre). Muchos de ellos  potencialmente cancerígenos y mutagénicos, que contaminarán el agua superficial y subterránea.
  2. La realidad es que si durante algún tiempo las geomembranas no presentan roturas o rasgaduras, tarde o temprano las tendrán. Nada es perfecto. El agua contaminada con estos elementos tóxicos pasará por entre las grietas y fracturas de la roca hasta llegar a los acuíferos.
  3. Es importante hacer notar que un contaminante en el agua subterránea no se transporta a la misma velocidad que el agua natural, por lo que los efectos de contaminación en los acuíferos mencionados no se presentarán y manifestarán inmediatamente, sino hasta después de varios años.

 

11. Condiciones hidrometeorológicas y sísmicas de esta región.

Vivimos en una región geográfica con presencia de huracanes, y más hoy en día que existe incertidumbre por la cantidad e intensidad de los mismos debido al cambio climático global, lo que podría generar fuertes avenidas, destruir la infraestructura, afectar las presas de jales, y arrastrar consigo los contaminantes expuestos provocando un gran desastre. También vivimos en una zona con actividad sísmica regional, y actividad sísmica local considerada importante debido a la cantidad de microsismos que se registran diariamente, producto de las fallas geológicas existentes. En el flanco oriental de la isla Espíritu Santo existe una zona de actividad sísmica que tuvo que ver con los temblores más importantes registrados en junio de 1995, con magnitudes de 4.1, 5.4 y 6.2 en la escala de Richter, y sismos recientes de 6.2 grados con réplicas de 4 a 5 grados en Septiembre de 2012, los cuales alarmaron a la población de la ciudad de La Paz y causaron daños estructurales en casas y edificios. No se descarta la posibilidad de que en cualquier momento ocurra un evento sísmico de esta magnitud, o aún mayor, en estas mismas zonas, o cerca de las áreas donde se estuviera explotando oro, con las tremendas consecuencias.

Por tanto, la presencia de huracanes y actividad sísmica, representa un riesgo potencial muy alto, con el establecimiento de estas empresas mineras tóxicas en el municipio de La Paz. Un desbordamiento o ruptura de las presas de jales, que podría ocurrir por ejemplo en el caso de la ubicación de “Los Cardones”, llevaría los contaminantes por el subsuelo afectando los acuíferos de El Carrizal, Melitón Albañez, La Matanza y La Paz.

 

12. Acuíferos principales del municipio de La Paz.

En los valles de las cuencas se encuentran los acuíferos, a partir de los cuales se abastece de agua a la población y zonas agrícolas, mediante el bombeo de pozos.

En Baja California Sur, debido a las escasas lluvias y la desmedida extracción de agua por el aumento de la población y actividades económicas, los acuíferos en su mayoría, se encuentran sobreexplotados. Tal es el caso de los acuíferos de La Paz, El Coyote, Los Planes, El Carrizal, y otros más.

Como estos acuíferos están sobreexplotados pero además, si se llegaran a contaminar, o contaminar aún más (como el acuífero de Los Planes) con arsénico, metales pesados y otras sustancias tóxicas, producto de la minería tóxica en el municipio de La Paz, estaremos condenados a un futuro incierto.

Cabe mencionar que en el caso de algunos acuíferos como Melitón Albañez, La Matanza, Cañada Honda y Todos Santos, que se localizan en una cuenca no concesionada aún para explotación minera, o que solo se encuentran al lado de un acuífero potencialmente afectable por la contaminación minera, son igualmente vulnerables a la contaminación debido a la interconexión subterránea entre ellos.

Igualmente, si se concesionaran para explotación minera las partes altas de las cuencas que pertenecen al municipio de Los Cabos, que se localizan alrededor de la sierra de La Laguna, se verán sin duda afectados por la potencial contaminación, los acuíferos de El Pescadero, Plutarco Elías Calles, Migriño, Cabo San Lucas, San José del Cabo, Cabo Pulmo y Santiago.

 

13. A manera de conclusión.

Si se llegaran a establecer los emplazamientos mineros tóxicos como “Los Cardones”, “La Pitalla”, o cualquier otro de este tipo, en las zonas concesionadas para esta actividad, que infortunadamente son las mismas zonas para captación de agua de lluvia y recarga de acuíferos. Entonces nos quedaremos con menos superficie de captación, disminuirán las lluvias, y a mediano plazo la poca agua que recarga los acuíferos estará contaminada principalmente con arsénico y metales pesados. De esta manera presenciaremos los impactos nocivos al medio ambiente y a la salud de las poblaciones, lo que se traducirá en un daño enorme e irreversible.

En muchos lugares del mundo donde se han establecido este tipo de empresas mineras tóxicas para extraer oro por lixiviación (separación) con cianuro, desde el inicio, durante y después de la explotación del mineral (aproximadamente 8-10 años) dejan solo daños ecológicos, áreas deforestadas recubiertas de chatarra, tanques oxidados, escombros de rocas, pilas o presas de jales llenas se contaminantes, plásticos y geomembranas rotas, agua contaminada, y personas enfermas. Consulte en Internet y se dará cuenta.

La mega minería tóxica a cielo abierto es una bomba de tiempo para el medio ambiente, transforma las cuencas hidrológicas, es una amenaza por la contaminación del agua subterránea  y acuíferos, y trae consigo una multitud de riesgos para la salud.

Esto puede ocurrir aquí, en nuestra región, nuestro municipio, nuestra comunidad. Tomemos en cuenta que el agua y la salud de la gente es lo más importante.

Reiteradamente escuchamos o leemos en los medios de comunicación acerca de la “minería tóxica”, pero disfrazada de un nuevo “calificativo”, que es la “minería sustentable” o “minería responsable”, es decir, ya se llegó al límite de la falsedad para hacer creer a la gente algo que no es. Por lo tanto, es necesario aclarar que no existe “minería tóxica” ni algún otro tipo de industria contaminante que se le pueda llamar “responsable” o “sustentable”. La “mega-minería tóxica a cielo abierto” es una actividad verdaderamente “irresponsable” e “insustentable”, ya que agrede gravemente al medio ambiente natural, afecta a la fauna y flora, contamina el aire y el agua, deteriora la salud de la población, pero además en nuestro municipio y nuestro Estado afectará directamente a la agricultura, principalmente la orgánica, e indirectamente al sector turismo que son la base de la economía.

 

14. Comentarios.

Este escrito titulado “Qué es la Mega-Minería Tóxica, y sus graves consecuencias en Baja California Sur”, fue realizado con la intensión de dar a conocer a la ciudadanía lo que es en realidad la “mega-minería tóxica a cielo abierto” que lamentablemente se practica en todo el mundo, pero en la actualidad pesa más en los países subdesarrollados donde no existen o no se respetan las leyes que protegen el ambiente, además de gobiernos que se dejan sobornar o que sumisamente lo permiten.

El poder económico y político a nivel mundial de las empresas monopólicas mineras a las cuales no les importa la destrucción del medio ambiente, la contaminación del agua, del aire, ni la salud de la población, únicamente su propio beneficio económico, les permite sobornar a funcionarios públicos, políticos y gobernantes. Es lamentable que nuestras autoridades e instituciones en cuya función está el conservar y proteger el medio ambiente y el agua, advirtiendo de este problema tan grave, no prohíban este tipo de minería.

 

Notas

Este manuscrito fue elaborado a partir de información en Internet, y por experiencia personal en el tema del agua. No se incluye Bibliografía.

Las imágenes que se presentan en este escrito fueron tomadas de Internet, en diferentes sitios que refieren a la minería y minería tóxica, excepto algunas figuras que son del archivo personal del autor.

Cuando se nombra a la sierra que conocemos como sierra de La Laguna, se deja como se conoce de manera popular. Se le quita el ‘de’ cuando se nombra la REBIOSLA (Reserva de la Biosfera Sierra La Laguna).

En el 2014 un escrito similar fue publicado impreso y en formato digital por el Grupo  Madrugadores de La Paz, así mismo, se encuentra en la página del SUPTACIBNOR, y en algunas páginas de Facebook.

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